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Un día antes de la inauguración de la Copa América Bicentenario, la estrella del fútbol argentino Lionel Messi ha declarado ante la Audiencia de Barcelona por la investigación que pesa sobre él por presunto fraude fiscal, investigación que surgió a partir de las filtraciones de los Panama Papers.
Hace unos meses, una fuente anónima filtró a una organización internacional de periodistas y a un medio europeo, millones de documentos provenientes de los despachos panameños Mossack Fonseca, a partir de los cuales cientos de políticos o millonarios de todo el mundo, han triangulado enormes sumas de dinero con el fin de lavarlo a través de empresas offshore; en el escándalo han salido salpicados cientos de empresarios y figuras públicas, entre ellos Lionel Messi.
La acusación es bastante seria, y tras haberse detectado que efectivamente había elementos suficientes de prueba, la fiscalía de España, está solitando imputar al futbolista con 22 meses y 15 días de cárcel tanto en contra de él, como de su padre, Jorge Messi.
Tras haber salido al público las filtraciones hace unos meses, el argentino, que es considerado por muchos como el mejor futbolista de la historia, y quien se encuentra en su mejor momento, negó las acusaciones y afirmó que incluso iba a demandar por injurias a los periodistas que publicaron la información.
No obstante que Messi ha tenido que bajar considerablemente el tono.
Tras ser cuestionado a su salida de la comparecencia en el tribunal, comenzó a dar indicios de culpabilidad, al menos de forma involuntaria, pues señaló que él sólo jugaba fútbol y sin poner gran atención firmaba los papeles y contratos que le pasaban su padre y equipo de abogados.
El astro del fútbol mundial señaló que es su padre quien administra sus negocios, recalcando que confía plenamente en él.
La fiscalía los acusa de haber evadido más de 4.6 millones de dólares el fisco, por concepto de beneficios obtenidos por sus derechos de imagen en los años 2007, 2008 y 2009, en las próximas semanas estará emitiendo su veredicto.
Messi, quien tuvo que salir de la concentración de la selección argentina en los Estados Unidos, también se había lesionado días antes, por lo que no se sabe con certeza si estará para el primer partido de la albiceleste en la Copa América, que será este lunes 6 de junio ante Chile, en lo que es una reedición de la pasada final.
